jueves, 27 de enero de 2011

Vacaciones día 2 - 25 de Enero: Bogotá.

Amanece fresco en Bogotá, nada de salir en bermudita y ojotas.
Después del amague me puse el jean, la camperita y fuimos a desayunar.
Aunque todos pensamos que el café colombiano es de los mejores del mundo, como todo depende de quién lo prepare. El café del hostel no podría saber peor, parecía filtrado con la media de algún mochilero después de 45 días de viaje así que decidimos ir a desayunar a un lugarcito recomendado por el cachorro. Tenía razón la pattiserie francesa sirve unos desayunos muy ricos y baratos.
Después de cargar combustible partimos hacia el centro para cambiar pesos colombianos y pagar la seña del depto. de Cartagena.
Paseamos un poco, recorrimos siete u ocho veces las mismas 6 cuadras, casi las aprendemos de memoria. Hay un acueducto muy lindo, lástima que no corre ni una gota de agua, pero con agua debe estar muy bueno.
Después de hacer las consultas correspondientes fuimos a almorzar unos crepes con unos jugos espectaculares a un lugar que nos recomendaron. Ahora que caigo fue una jornada muy afrancesada, faltaba que nos acompañe Telerman.



Mas tarde fuimos a conocer el museo del oro, muy lindo, con una visita guiada que por momentos se ponía un poco graciosa o por lo menos para un grupo de seis energúmenos como nosotros resultaba así. En el recorrido nuestra guía se cruzaba con otra un poco menos didáctica que le gritaba a los turistas cada cosa que describía como si fuese una orden: ven esas máscaras de ahí, mírenlas! les digo que las miren!
No fuimos los únicos que lo notaron, nos hicimos amigos de unas chicas de Cali que también se estaban divirtiendo con los comentarios de la guía estricta. Sacamos algunas fotos muy buenas y otras tantas que ya veremos que tal quedan. Pero vale la pena la visita, es otra experiencia.


Al salir del museo fuimos a comer frutas que te venden en vasito a una plaza que está a un par de cuadras, nuevamente nos llevó como 6 cuadras llegar, pero ya nos orientamos bien.
Mientras comíamos la fruta viene un señor muy educado a pedirnos plata contando no se qué tragedia, eso acá es muy común, mucho mas que en Buenos Aires, hay dos o tres personas por cuadra que se te acercan muy educadamente a manguear, la cuestión es que este buen hombre me dice, por favor unas monedas aunque sea para tomarme un "tinto". Ahí me cambió la cara y le dije que se fuera que no le iba a dar mientras por dentro pensaba que viejo caradura, borracho...
Mi opinión no duro mucho, después de eso fuimos a tomar un café en uno de los bares de la plaza y tuve la revelación, en Colombia o por lo menos en Bogotá, un "tinto" es un vaso de café. Me sentí mal por el hombre y peor por ser tan prejuicioso. Terminamos la merienda con algunas cervecitas, estamos probando porque hay montones de marcas bastante malas y de tanto probar van mejorando.
Volvimos al hostel, negociamos que nos den una habitación mas con baño privado, conseguimos el precio que nos cerró y con cachorro fuimos a un barzucho que hay a la vuelta para llamar a una combi para poder ir los 6 juntos a cenar a una zona que llaman Chopinero, un barrio muy lindo de casitas angostas todas iguales al estilo londinense pero de ladrillo a la vista. Cuando salimos de llamar, en la esquina del hostel se nos acercan tres tipos a ofrecernos marihuana, cocaína, lsd y por poco pomada para zapatos, cuando nos escucharon argentos uno nos dice: son argentinos che! aguante Cole! yo viví en la Florida, cerca de Munro y me hice hincha de Colegiales de la B!
Bueno, en síntesis nos quiso regalar merca, nos contó que tiene un hermano que vive en Belgrano, cerca de Nuñez y nos recordó que las argentinas son las minas mas lindas del mundo. Después se ve que nuestra cara no demostraba mucha credulidad porque se arremangó el pantalón para mostrarnos su tatuaje de "COLE". Increíble. Lo saludamos a el y a sus dos mutantes amigos al mejor estilo bronx y nos volvimos al hostel. Como no conseguimos la combi, le pedimos al ninja de la esquina que nos consiga dos taxis, al rato nos avisa que estaba EL taxi, salimos y había un Corsa cinco puertas, el chofer no tenía drama, pretendía que fuéramos los seis mas el en el corsita, hicimos un par de intentos acrobáticos pero era mas que evidente que no íbamos a durar así mas de una cuadra. Nos separamos y con Jorge y Charly subimos a otro taxi, bastante loco también porque el chofer hacía de niñera y venía  con una nenita de unos seis años de acompañante, todo el taxi con alfombras de los Looney Tunes, muy cómico, parecía del cartón network.
El recorrido hacia Chapinero estuvo muy bueno, los taxis van a mil por un camino de montaña desde donde se ve gran parte de la ciudad, aunque un poco movida por las curvas y contracurvas. A todos nos dieron unas ganas terribles de alquilar un auto para salir a hacer ese recorrido a lo que se pueda.
Llegamos a "In vitro" el lugar que nos recomendaron pero era solo boliche así que caminamos un poco por el barrio buscando un lugar para comer pero terminamos comiendo en una especie de KrustyBurguer local dentro de una Esso. Las hamburguesas estaban muy buenas, hoy nos enteramos que ese lugar es el mejor de ese estilo. mmmm...
Después entramos al "boliche". Un primer piso, bastante chico, completamente vidriado (de ahí el nombre) y lleno de gente. La música estuvo buena y entre turistas y locales había muy buena onda. Compran de a botellas de aguardiente, whisky y cerveza. Es que hace mucho calor, claro. Nos encontramos con gente que había estado la noche anterior en lo de Ceci (el bar tipo Constitución), es increíble el contraste entre un lugar y el otro y volver a encontrar a la misma gente.
A la vuelta volvimos a tomar dos mini taxis, acá está lleno, y aunque le dijimos a nuestro chofer que no pagábamos mas de $8000 que es lo que nos salió la ida nos quiso dar un paseo por la ciudad, ojo, no es que tuviera alma de guía turístico, nos quería currar. Yo iba sentado adelante tratando de encontrar puntos de referencia en una ciudad que nunca recorrí. Finalmente encontré uno, sobre el cerro descubrí el Monserrate bien iluminado, nos estaba llevando a cualquier lado, pero mal, se abrió muchísimo del camino. Lo hicimos retomar y dejarnos en el hostel y al final nos cobró $10000. Creo que la sacamos barata.
Aunque es un país nuevo, con gente nueva, amigos nuevos y sin que todavía hayamos visto el mar, ya encontré un parentesco con el resto de las vacaciones con amigos, nos divertimos y reímos muchísimo, muy barato y como habrán notado, nos la pasamos comiendo o tomando...

Algunas fotos

2 comentarios:

  1. muy bueno POrter...chinocapucchino!!! jajaja... me reí mucho con los relatos, historias...cuentos... hermosa experiencia que se diviertan y disfruten mucho!!! saludos a todos!!!

    ResponderEliminar
  2. Hola!!!! Me podrian recomendar Hoteles en Bogota Muchas Gracias!!!

    ResponderEliminar